El trío Kraak & Smaak presenta su nuevo álbum, ‘Velvet Seas’. Un trabajo que siente como una continuación y un renacimiento. Escrito entre los adoquines de Leiden y la neblina soleada de Los Ángeles, el álbum absorbe colores de la costa oeste, texturas psicodélicas brillantes, raíces profundas de funk y una amplitud cinematográfica, sin perder el inconfundible pulso de Kraak & Smaak. Una constelación de colaboradores orbita este disco, desde sus aliados de siempre IVAR y Berenice van Leer, hasta espíritus afines como Izo FitzRoy, Butter Bath, The Undercover Dream Lovers, iogi, Kosta G (de RIO KOSTA, anteriormente conocido como PWNT) y Kainalu. Juntos dan forma a un álbum panorámico pero íntimo, nostálgico y a la vez orientado al futuro.
El viaje comienza con “Midnight Cowboy”. Su muro de sonido evoca un paisaje cinematográfico de los 70, con baterías en vivo y el clásico beat de K&S, invitando al oyente a un teatro de funk luminoso y psicodelia etérea. Luego, “Herbs & Wine” introduce el timbre aterciopelado de IVAR. Envuelto en texturas ahumadas y evocando la tradición del soul de Stax, es un tema sensual, de combustión lenta, que evoca bares nocturnos y bronces reluciendo en penumbra. Luego tenemos “Nothing Is Forever”, una meditación melancólica sobre el tiempo, con Kosta G y una atmósfera de yacht rock psicodélico. Le sigue “Travel Light”, una explosión disco-orquestal con IVAR, ideal para festivales y pistas de baile. “Heat”, junto a Butter Bath, mezcla psych-pop y nu-disco en un tema elegante y soleado. ‘Velvet Seas’, con Izo FitzRoy, se convierte en el corazón espiritual del disco, con una voz góspel sobre sintetizadores brillantes.
The Undercover Dream Lovers aportan psicodelia expansiva en “Isn’t It Strange”, mientras que “All I Need”, con iogi, evoca el dolce vita con calidez setentera. IVAR regresa en “Come What May”, un tema vibrante y pegajoso que celebra su conexión con K&S, y “Morning Reverie”, con Berenice van Leer, es una canción de cuna californiana que flota como un amanecer sereno. “Real Love”, junto a Kainalu, fusiona soul clásico y texturas cósmicas en un tema radiante, mientras que “Ear to the Ground” se sumerge en paisajes sonoros polvorientos y analógicos de la costa oeste. El cierre llega con “Open the Blinds”, un himno funk lleno de luz, que mar



























